Tamaño de la marihuana: por qué es importante
Elegir el tamaño de maceta adecuado para cultivar cannabis es crucial para el crecimiento sano y el rendimiento de tus plantas. El tamaño de la maceta influye en el desarrollo de las raíces y en el espacio que tienen para absorber los nutrientes. Una maceta demasiado pequeña puede impedir el desarrollo de la planta, ya que las raíces no tienen espacio suficiente para extenderse. Esto suele provocar la congestión de las raíces, lo que ralentiza el crecimiento y hace que la planta sea susceptible a las enfermedades. Por otra parte, una maceta demasiado grande puede aumentar el riesgo de riego excesivo, ya que la tierra permanece húmeda durante demasiado tiempo y las raíces pueden ahogarse o pudrirse. Por lo tanto, es importante adaptar el tamaño de la maceta a la fase de crecimiento y a las necesidades de la planta para garantizar un desarrollo óptimo.
Pautas para el tamaño ideal de una maceta de cannabis
Para sacar el máximo partido a tus plantas, existen algunas pautas que te ayudarán a elegir el tamaño de maceta adecuado para tus plantas de cannabis:
1. Plantas jóvenes y esquejes (0,5 - 2 litros)
Las macetas pequeñas con un volumen de entre 0,5 y 2 litros son adecuadas para el cultivo de plántulas o esquejes. Al principio, las raíces pueden desarrollarse bien en estas macetas sin que la planta se "pierda" en demasiada tierra. En cuanto la planta crezca, hay que trasplantarla para que pueda seguir creciendo bien.
2ª fase vegetativa (7 - 11 litros)
En la fase de vegetación, cuando la planta aumenta en altura y masa foliar, debe aumentar el tamaño de la maceta a 7 a 11 litros. En esta fase, las raíces necesitan más espacio para extenderse y la planta puede desarrollarse más rápidamente.
3ª fase de floración (a partir de 15 litros)
En cuanto la planta entre en la fase de floración, es importante que disponga de espacio suficiente para que las raíces crezcan con fuerza. Las macetas de 15 litros o más ofrecen espacio suficiente. Las plantas más grandes, que necesitan aún más espacio para las raíces, pueden tener cabida incluso en macetas de 20 a 30 litros. Este mayor tamaño de maceta garantiza un mejor suministro de nutrientes y puede permitir mayores rendimientos.
Variedades automáticas
Para las variedades de cannabis autofloreciente que se mantienen más pequeñas y florecen más rápido, suelen bastar macetas de 10 a 15 litros. Como estas variedades requieren menos espacio, se pueden plantar directamente en la maceta definitiva para evitar trasplantes, que podrían causar un estrés innecesario. Las autoflorecientes recorren todo su ciclo vital en un periodo de tiempo fijo, independientemente de las condiciones de luz, por lo que es especialmente importante proporcionar a las plantas unas condiciones óptimas desde el principio. El trasplante puede ralentizar el crecimiento, y como las autoflorecientes tienen menos tiempo para recuperarse, conviene evitarlo. Al elegir una maceta final suficientemente grande, las raíces disponen desde el principio del espacio necesario para desarrollarse sin molestias, lo que optimiza el crecimiento de las raíces y, por tanto, también la absorción de nutrientes. Esto contribuye a una planta más robusta y a un mejor rendimiento.
Tamaño de la maceta Cannabis Outdoor:
Para el cultivo exterior, las macetas deben ser aún más grandes, ya que las plantas suelen necesitar más espacio para sus raíces. En este caso se recomiendan macetas de al menos 20 a 30 litros, dependiendo del tamaño que vaya a alcanzar la planta. Las plantas de exterior se benefician especialmente de macetas más grandes, ya que pueden absorber más nutrientes y desarrollar una estructura más estable. El espacio extra permite que las raíces se extiendan a lo largo y ancho, lo que ayuda a la planta a resistir mejor condiciones climáticas extremas como el viento o las lluvias torrenciales. Las macetas más grandes también permiten retener el agua durante más tiempo, lo que resulta especialmente beneficioso en los calurosos meses de verano, ya que las plantas necesitan ser regadas con menos frecuencia y reciben humedad continuamente. Esto permite que la planta crezca en condiciones óptimas y produzca un mayor rendimiento.
Ventilación y drenaje
Independientemente del tamaño de maceta elegido, es fundamental que tenga buenos agujeros de drenaje para evitar que se encharque. Si el agua no puede drenarse correctamente, las raíces se pudren rápidamente, lo que puede perjudicar gravemente el crecimiento de la planta. También puedes utilizar macetas de tela especiales o macetas de aire, que permiten una mejor circulación del aire alrededor de las raíces y favorecen así su crecimiento. Estas macetas evitan que las raíces se enrosquen en la maceta, ya que la ventilación adicional las anima a formar raíces nuevas y finas. Una buena aireación y un buen drenaje son tan importantes como el tamaño adecuado de la maceta, ya que favorecen la salud del sistema radicular y reducen el riesgo de exceso de riego y carencias de nutrientes. Esto garantizará que su planta tenga las mejores condiciones para crecer fuerte y sana desde el principio.