Comprar semillas de marihuana

Para los principiantes, recomendamos variedades robustas y fáciles de cuidar, como las índicas o las híbridas. Estas variedades son menos susceptibles a los errores de cultivo y suelen tener tiempos de floración más cortos. Las plantas índica son compactas y tupidas, lo que las hace ideales para el cultivo de interior. Los híbridos combinan las mejores características de la sativa y la índica, por lo que ofrecen una necesidad de cuidados y un rendimiento equilibrados.

Las plantas de marihuana necesitan mucha luz para crecer sanas y producir un alto rendimiento. Lo ideal es que reciban entre 12 y 18 horas de luz al día. Para el cultivo de interior se recomiendan lámparas LED de alta calidad, ya que ofrecen un amplio espectro de luz y son energéticamente eficientes. Para el cultivo exterior, elija un lugar soleado que reciba al menos 6 horas de luz solar directa al día.

La frecuencia de riego depende de varios factores, como el tamaño de la maceta, la fase de crecimiento y las condiciones ambientales. Es importante regar las plantas con regularidad, pero evitando el encharcamiento, ya que puede provocar la pudrición de las raíces. Un buen indicador es dejar que la capa superior del suelo se seque entre riegos. Las plantas suelen necesitar más agua en la fase de crecimiento que en la de floración.

El tiempo de floración varía según la variedad. Las variedades índicas tienen un periodo de floración más corto, de entre 8 y 12 semanas, mientras que las sativas pueden tardar hasta 16 semanas. Los híbridos suelen tener un tiempo intermedio. El tiempo exacto de floración también puede verse influido por las condiciones ambientales, como los ciclos de luz y la disponibilidad de nutrientes. Es importante vigilar las plantas con regularidad y prestar atención a la madurez de las flores.

Tras la recolección, las flores deben secarse cuidadosamente y, a continuación, curarse en recipientes de cristal herméticos. El curado mejora el sabor, la potencia y la conservación. Durante las dos primeras semanas, los recipientes deben abrirse a diario durante 10-15 minutos para que salga el exceso de humedad. Después, los envases pueden guardarse en un lugar fresco y oscuro, a unos 15-20°C. Evite la luz solar directa y la humedad elevada para evitar el moho y la degradación de los cannabinoides.

Los problemas más comunes al cultivar plantas de marihuana son el riego excesivo, la infestación de plagas, el moho y la deficiencia o el exceso de nutrientes. El riego excesivo puede provocar la pudrición de las raíces, mientras que el riego insuficiente inhibe el crecimiento. Las infestaciones de plagas como la araña roja, los pulgones y los trips pueden debilitar las plantas y transmitir enfermedades. El moho, sobre todo el moho gris, suele aparecer cuando hay mucha humedad. Una inspección periódica de las plantas y medidas preventivas como una buena ventilación y la cantidad adecuada de nutrientes pueden ayudar a evitar estos problemas.