Cómo regar correctamente el cannabis

Wie Cannabis richtig gießen

Niklas Bergmann, M.A.

Bioquímico, autor especializado

Inhaltsverzeichnis: Cómo regar correctamente el cannabis

Regar las plantas de cannabis correctamente es crucial para que crezcan sanas y rindan. Requiere un equilibrio preciso, ya que tanto el riego excesivo como el insuficientepueden tener graves consecuencias. El riego excesivo provoca la falta de oxígeno en las raíces, lo que da lugar a la pudrición de las raíces y a hojas mustias y amarillentas. El riego insuficiente, por el contrario, hace que las hojas se sequen y se pongan flácidas al no recibir las raíces suficiente humedad. Para evitar estos problemas, las plantas sólo deben regarse cuando los 2-3 cm superiores de la tierra estén secos. Es esencial que el riego llegue a toda la zona radicular. También es importante un buen drenaje: las macetas con suficientes agujeros de drenaje y un suelo bien drenado evitan el encharcamiento. La hora del día en que se riega también influye: regar por la mañana ayuda a suministrar agua a las plantas durante el día y permite que se evapore el exceso de humedad. Una buena circulación del aire, luz suficiente y un aporte adecuado de nutrientes también favorecen el crecimiento sano de las plantas. Un seguimiento regular de las plantas ayuda a reconocer los signos de estrés en una fase temprana y a tomar las medidas adecuadas. Seguir estas prácticas garantizará que las plantas de cannabis se mantengan sanas y prosperen de forma óptima.

¿Por qué es tan importante un riego adecuado?

Importancia de un riego adecuado

Regar las plantas de cannabis es algo más que una rutina diaria: es un arte y una ciencia. El suministro de agua adecuado desempeña un papel fundamental en la salud y el crecimiento de tus plantas. El cannabis es una planta resistente, pero cuando se trata de agua, puede ser bastante quisquillosa. Con muy poca agua, las plantas se deshidratan rápidamente y se atrofia su crecimiento. Demasiada agua y corres el riesgo de que se pudran las raíces, lo que puede debilitar toda la planta.

El cannabis necesita un equilibrio preciso: agua suficiente para nutrir las raíces y absorber los nutrientes, pero no tanta como para que se queden encharcadas y se "ahoguen". Un programa de riego bien pensado garantizará que tus plantas tengan la mejor oportunidad posible de crecer fuertes y sanas.

Efectos del riego excesivo y del riego insuficiente

Riego excesivo

El riego excesivo es un problema común para los cultivadores de cannabis, especialmente los principiantes. Si las raíces de tu planta están constantemente en agua, carecen del oxígeno necesario. Esto puede provocar la pudrición de las raíces, una enfermedad grave que detiene el crecimiento de las plantas y, en última instancia, puede llevarlas a la muerte. El riego excesivo se manifiesta con hojas amarillentas y flácidas y, en general, con un aspecto enfermizo de la planta. Otro problema es que el exceso de agua elimina los nutrientes del suelo, lo que provoca carencias.

Riego insuficiente

Por otro lado, el riego insuficiente también es problemático. Si la planta no recibe suficiente agua, puede deshidratarse. Esto se caracteriza por hojas secas y crujientes, crecimiento lento y, en casos extremos, la muerte de la planta. Las plantas deshidratadas no pueden absorber los nutrientes del suelo, lo que provoca carencias de nutrientes y otros problemas de salud. Es importante vigilar de cerca y ajustar las necesidades de agua de las plantas, sobre todo durante los calurosos meses de verano o cuando hay mucha luz.

Aspectos básicos del riego

Suelo y drenaje

Elegir el suelo adecuado y un buen drenaje son la base para regar con éxito las plantas de cannabis. Utiliza una tierra de alta calidad y buen drenaje que sea específicamente adecuada para el cultivo de cannabis. Esta tierra debe ser suelta y ligera para garantizar una circulación óptima del aire y proporcionar a las raíces suficiente oxígeno. Los agujeros de drenaje en el fondo de las macetas son esenciales para permitir que el exceso de agua se escurra y evitar el encharcamiento. Un buen drenaje evita que las raíces se estanquen en el agua y favorece un desarrollo sano de las raíces.

Cantidad de agua

La cantidad correcta de agua es crucial para el bienestar de tus plantas de cannabis. Como regla general, riega las plantas hasta que salga un poco de agua por los agujeros de drenaje del fondo de la maceta. Esto garantiza que el agua llegue a las raíces y que el exceso de sales y nutrientes se elimine de la tierra. La cantidad de agua necesaria puede variar en función del tamaño de la planta, el tipo de sustrato y la temperatura ambiente. Es importante no regar en exceso ni por debajo de la planta para evitar la pudrición de las raíces o la deshidratación.

Frecuencia de riego

La frecuencia de riego de las plantas de cannabis depende de varios factores, como la fase de crecimiento de la planta, el tamaño de la maceta y las condiciones ambientales. Un método probado consiste en volver a regar sólo cuando los 2-3 cm superiores de la tierra estén secos. Así se evita el riego excesivo y se garantiza que las raíces puedan absorber suficiente oxígeno entre riegos. En las primeras fases de crecimiento, las plantas suelen necesitar menos agua, mientras que la demanda aumenta en la fase de floración. Observe sus plantas y ajuste la frecuencia de riego en consecuencia.

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Cantidad de riego de cannabis

La cantidad correcta de agua

La cantidad correcta de agua es esencial para el crecimiento sano de tus plantas de cannabis. La cantidad de agua debe ser suficiente para proporcionar a las raíces los nutrientes necesarios, pero no tanta como para que se produzca un encharcamiento. Una buena guía es regar la planta hasta que salga un poco de agua por los agujeros de drenaje del fondo de la maceta. De esta forma se garantiza que todo el sistema radicular reciba agua de forma uniforme.

¿Cuánta agua necesita una planta de cannabis?

La cantidad de agua necesaria puede variar mucho en función de la fase de crecimiento de la planta:

  • Fase de plántula: En los primeros días tras la germinación, las plantas necesitan muy poca agua. La tierra debe estar húmeda, pero no mojada. Lo mejor es utilizar un pulverizador para no regar en exceso las sensibles plántulas.

  • Fase vegetativa: En esta fase de crecimiento, las necesidades de agua aumentan a medida que las plantas crecen rápidamente de tamaño. Riegue las plantas a fondo, pero deje que la tierra se seque ligeramente entre riegos.

  • Fase de floración: Durante la fase de floración, las plantas necesitan más agua, sobre todo cuando producen flores grandes. Asegúrese de que la tierra permanezca uniformemente húmeda, pero evite el encharcamiento.

Una regla general es regar cada vez con un 10-20% del volumen de la maceta. Para una maceta de 10 litros, esto equivaldría a unos 1-2 litros de agua por riego.

Factores que influyen en la cantidad de agua

Varios factores pueden influir en la cantidad de agua que necesitan tus plantas de cannabis:

  • Tamaño de la maceta: las macetas más grandes necesitan más agua, ya que contienen más tierra y, por lo tanto, pueden retener más humedad. Las macetas más pequeñas se secan más rápidamente y necesitan ser regadas con más frecuencia.

  • Temperatura y humedad ambiente: en ambientes cálidos y secos, el agua se evapora más rápidamente, por lo que las plantas necesitan ser regadas con más frecuencia. En climas más frescos o húmedos, la tierra permanece húmeda durante más tiempo.

  • Intensidad de la luz: Una iluminación intensa puede aumentar la evaporación e incrementar las necesidades de agua de las plantas. Asegúrese de que las plantas reciben suficiente agua bajo una iluminación intensa.

  • Medio de cultivo: Los distintos sustratos tienen diferentes capacidades de almacenamiento de agua. Las fibras de coco, por ejemplo, se secan más rápidamente que los suelos a base de turba y, por tanto, deben regarse con más frecuencia.

  • Tamaño y edad de la planta: Las plantas más grandes y viejas necesitan más agua que las más pequeñas y jóvenes, ya que tienen más masa foliar y sistemas radiculares más grandes.

Si tienes en cuenta estos factores y adaptas tus prácticas de riego en consecuencia, te asegurarás de que tus plantas de cannabis reciban siempre la cantidad de agua adecuada. Controle sus plantas con regularidad y ajuste la cantidad de agua según sea necesario para garantizar unas condiciones de crecimiento óptimas.

Consejos para determinar la cantidad de agua

Métodos para medir la cantidad correcta

  1. Pruebadel dedo: Un método sencillo para comprobar el contenido de humedad de la tierra es la prueba del dedo. Introduzca el dedo a unos 2-3 cm de profundidad en la tierra. Si la tierra está seca, es hora de regar. Si aún está húmeda, puedes posponer el riego.

  2. Peso de la maceta: Pesa las macetas cuando estén completamente regadas y cuando la tierra esté seca. Al cabo de un tiempo, tendrás una idea del peso que debe tener una maceta con la cantidad de agua adecuada. Esto resulta especialmente útil en el caso de las plantas más grandes, en las que la prueba del dedo no siempre es suficiente.

  3. Medidor dehumedad: Un medidor de humedad es una herramienta muy práctica que puede indicarte con exactitud el grado de humedad de la tierra a distintas profundidades. Estos aparatos son relativamente baratos y fáciles de usar. Te ayudan a regar con mayor precisión y a evitar el riego excesivo o insuficiente.

  4. Tabla de riego: Lleva una tabla o diario en el que anotes cuándo y cuánta agua has dado a las plantas. Esto te ayudará a reconocer un patrón y a planificar mejor las cantidades de riego.

Evita los errores más comunes

  1. Regar con demasiada frecuencia: Uno de los errores más comunes es regar las plantas con demasiada frecuencia. Esto provoca una falta de oxígeno en la zona radicular y puede causar la pudrición de las raíces. Espere siempre a que los 2-3 cm superiores de la tierra estén secos antes de volver a regar.

  2. Regar demasiado poco: Por otro lado, regar con muy poca frecuencia puede hacer que las plantas se deshidraten y no absorban suficientes nutrientes. Asegúrese de que la tierra nunca se seque por completo.

  3. Mal drenaje: Sin un drenaje suficiente, las raíces pueden estancarse en el agua y pudrirse. Utilice siempre macetas con agujeros de drenaje y tierra bien drenada para evitar que se encharquen.

  4. Regar según un horario fijo: Las plantas tienen necesidades de agua diferentes según la estación de crecimiento, el clima y otros factores. En lugar de regar según un horario fijo, observa tus plantas y ajusta la cantidad de agua a sus necesidades actuales.

  5. No prestes atención a las condiciones ambientales: La temperatura y la humedad influyen en la rapidez con que se seca la tierra. Adapte su práctica de riego a las condiciones ambientales actuales. En periodos más cálidos y secos, las plantas necesitan más agua.

  6. Riegue superficialmente: Riegue las plantas a fondo para que el agua llegue a las raíces. El riego superficial puede hacer que las raíces crezcan a poca profundidad y que la planta carezca de estabilidad y nutrientes.

Siguiendo estos métodos y consejos, te asegurarás de que tus plantas de cannabis reciban la cantidad de agua adecuada y se desarrollen de forma óptima.

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Con qué frecuencia regar el cannabis

Determinar la frecuencia de riego

La frecuencia de riego de las plantas de cannabis requiere prestar atención y ajustarse a diversos factores. No existe una regla universal para la frecuencia de riego, ya que depende de diversas variables. Una regla general es regar las plantas cuando los 2-3 cm superiores de la tierra estén secos. Así se evita el riego excesivo y se garantiza que las raíces puedan absorber suficiente oxígeno entre riegos.

Factores que influyen en la frecuencia de riego

  1. Temperatura ambiente: En climas cálidos y durante los periodos de calor, el agua se evapora más rápidamente, por lo que es necesario regar con más frecuencia. En climas más fríos, el suelo permanece húmedo durante más tiempo.

  2. Humedad: Una humedad elevada reduce la tasa de evaporación, mientras que una humedad baja la aumenta. Ajuste la frecuencia de riego en consecuencia.

  3. Tamaño de la planta: Las plantas más grandes y con más masa foliar evaporan más agua y, por tanto, necesitan regarse con más frecuencia que las plantas más pequeñas.

  4. Tamaño y material de la maceta: Las macetas pequeñas se secan más rápidamente que las grandes. Las macetas de materiales porosos, como la terracota, permiten que el agua se evapore más rápidamente que las de plástico o tela.

  5. Tipo de sustrato: Los distintos sustratos de cultivo tienen diferentes capacidades de almacenamiento de agua. Las fibras de coco, por ejemplo, se secan más rápidamente que la turba y hay que regarlas con más frecuencia.

  6. Fase decrecimiento: Las necesidades de agua varían en función de la fase de crecimiento de la planta (véase el apartado siguiente).

Diferentes fases de crecimiento

  1. Fase de plántula: Las plántulas necesitan poca agua. Mantenga la tierra húmeda, pero no mojada, para no dañar las sensibles raíces.

  2. Fase vegetativa: En esta fase, la planta crece rápidamente y necesita más agua. Riegue las plantas a fondo, pero deje que la tierra se seque un poco entre riego y riego.

  3. Fase de floración: Durante la fase de floración, las necesidades de agua aumentan, sobre todo cuando la planta desarrolla flores grandes. Mantenga la tierra uniformemente húmeda, pero evite el encharcamiento.

Consejos prácticos sobre la frecuencia de riego

  1. Pruebadel dedo: Compruebe con regularidad la humedad de la capa superior del suelo realizando la prueba del dedo. Introduzca el dedo a unos 2-3 cm de profundidad en la tierra. Si se nota seca, es hora de regar.

  2. Peso de la maceta: Levanta la maceta para comprobar su peso. Una maceta ligera significa que la tierra está seca y debe regarse.

  3. Medidor dehumedad: Utiliza un medidor de humedad para determinar el contenido exacto de humedad de la tierra. Esto ayuda a regar con más precisión y a evitar el riego excesivo o insuficiente.

Señales del momento adecuado

  1. Capa superior del suelo seca: Espere a que los 2-3 cm superiores del suelo estén secos antes de volver a regar.

  2. Estado de las hojas: Observe las hojas de sus plantas. Las hojas caídas pueden ser un signo de necesidad de agua, mientras que las hojas amarillas o marchitas pueden indicar un riego excesivo.

  3. Crecimiento de las raíces: Un crecimiento sano de las raíces es un buen indicador de que la planta está recibiendo suficiente agua. Si las raíces son visibles en los orificios de drenaje, puede ser el momento de comprobar la frecuencia de riego y ajustarla si es necesario.

Buenas prácticas

  1. Riegue por la mañana: Es preferible regar las plantas por la mañana. Esto permite que el agua se absorba durante el día y que el exceso de humedad se evapore por la tarde.

  2. Riegue a fondo: Asegúrese de que el agua llega a toda la zona radicular. Riegue lenta y uniformemente hasta que salga un poco de agua por los agujeros de drenaje del fondo de la maceta.

  3. Ajuste el programa de riego: Ajuste regularmente la frecuencia y la cantidad de riego a las necesidades de sus plantas y a las condiciones ambientales.

  4. Evite el agua estancada: No deje las plantas encharcadas. Retire el exceso de agua de los platillos para evitar que se pudran las raíces.

Si tienes en cuenta estos factores y consejos, podrás asegurarte de que tus plantas de cannabis reciban siempre la cantidad óptima de agua para crecer sanas y fuertes.

Cuándo regar el cannabis

El momento adecuado para regar

Encontrar el momento adecuado para regar tus plantas de cannabis es crucial para su salud y crecimiento. El momento del riego puede afectar al consumo de agua, la absorción de nutrientes y el riesgo de enfermedades. Existen diferentes enfoques sobre cuándo es mejor regar, pero las recomendaciones generales pretenden tener en cuenta las necesidades de la planta y las condiciones ambientales.

¿Regar por la mañana o por la noche?

Regar por la mañana

A menudo se considera que regar por la mañana es el mejor momento. La temperatura es más fresca por la mañana, lo que significa que el agua se evapora más lentamente y las plantas tienen tiempo suficiente para absorberla. Regar por la mañana mantiene la tierra húmeda durante el día, lo que facilita la absorción de nutrientes. Además, el exceso de agua que no se absorbe puede evaporarse durante el día, lo que reduce el riesgo de pudrición de las raíces.

Regar por la noche

Regar por la noche también puede ser beneficioso, sobre todo en climas muy cálidos. Si riega por la tarde, el agua se evapora más lentamente durante la noche. Sin embargo, aumenta el riesgo de que aparezcan moho y hongos, ya que las plantas permanecen húmedas durante más tiempo. Para minimizar este riesgo, no riegue demasiado tarde por la noche y asegúrese de que haya una buena circulación de aire alrededor de las plantas.

Influencia del momento de riego en el crecimiento de las plantas

El momento del riego afecta a la salud y el crecimiento de tus plantas de cannabis de varias maneras:

  1. Absorción de nutrientes: Las plantas absorben agua y nutrientes a través de sus raíces. Si riegas en un momento desfavorable, la absorción puede ser ineficaz. Las plantas regadas por la mañana tienen todo el día para utilizar el agua y los nutrientes, lo que conduce a un mejor crecimiento.

  2. Regulación de la temperatura: El riego ayuda a regular la temperatura de las plantas. En climas cálidos, regar por la mañana puede refrescar las plantas y protegerlas del estrés térmico.

  3. Prevención de enfermedades: regar por la tarde mantiene la tierra húmeda durante más tiempo, lo que aumenta el riesgo de infestación por hongos y podredumbre de las raíces. Regar por la mañana ayuda a eliminar el exceso de humedad durante el día.

Estrategias para optimizar el momento del riego

Adaptarse al clima

  1. Clima cálido: En climas cálidos, es mejor regar por la mañana. Esto ayuda a mantener las plantas frescas durante el día y a utilizar el agua de forma eficiente.
  2. Climas más fríos: En climas más fríos, regar por la mañana también puede ser beneficioso, ya que la evaporación es menor y las plantas pueden seguir absorbiendo suficiente agua.

Uso de sistemas de riego

  1. Sistemas de riego automático: Estos sistemas pueden programarse para regar las plantas en los momentos óptimos sin que tengas que preocuparte por ello. Esto es especialmente útil si quieres regar regularmente a la misma hora.
  2. Riego por goteo: Los sistemas de riego por goteo liberan el agua de forma lenta y continua, lo que mantiene la tierra uniformemente húmeda y minimiza la evaporación.

Más consejos para la optimización

  1. Riegue a fondo: No importa a qué hora del día riegue, asegúrese de que el agua penetra profundamente en la zona radicular. Esto favorece el crecimiento sano de las raíces y reduce el riesgo de raíces superficiales.
  2. Compruebe el suelo: Utilice los métodos anteriores (prueba del dedo, peso de la maceta, medidor de humedad) para asegurarse de que sus plantas realmente necesitan agua antes de regar.
  3. Evita que las hojas se mojen: Intenta mantener las hojas secas, sobre todo cuando riegues por la noche, para minimizar el riesgo de infecciones fúngicas.

Si sigues estas estrategias y consejos, podrás optimizar el momento del riego y asegurarte de que tus plantas de cannabis crezcan sanas y vigorosas.

Riego excesivo del cannabis

¿Qué es el riego excesivo?

Regar en exceso significa que las plantas de cannabis reciben más agua de la que necesitan, lo que provoca la saturación del suelo. Este exceso de humedad puede impedir que las raíces absorban suficiente oxígeno, provocando diversos problemas de salud. Las principales causas del riego excesivo son un riego demasiado frecuente, un drenaje deficiente, suelos pesados y el uso de macetas demasiado grandes para plantas pequeñas. Si la tierra permanece constantemente húmeda, las raíces carecen del oxígeno que necesitan para funcionar correctamente.

Síntomas del riego excesivo

El riego excesivo se reconoce por varios síntomas. Las hojas amarillas, sobre todo en las partes inferiores de la planta, suelen ser la primera señal. Las hojas caídas que se marchitan a pesar de un riego adecuado también pueden indicar un riego excesivo. Otra señal de alarma es la podredumbre de las raíces, que se caracteriza por un olor desagradable y raíces negras y viscosas. Las plantas que crecen más despacio o dejan de crecer por completo y las hojas deformadas son otros indicios de que la planta está sufriendo un exceso de agua.

¿Cómo evitar el riego excesivo?

Para evitar el riego excesivo, es importante vigilar de cerca y regular las necesidades de agua de las plantas. Espere a que los 2-3 cm superiores de la tierra estén secos antes de volver a regar. Así evitará que las plantas permanezcan en agua todo el tiempo y se asfixien las raíces. Riegue las plantas a fondo para que el agua penetre profundamente en la tierra y llegue a toda la zona radicular. Esto favorece la formación de raíces profundas y plantas más robustas. En lugar de dar pequeñas cantidades de agua con frecuencia, es mejor regar con menos frecuencia pero a fondo.

Consejos sobre drenaje

Un buen drenaje es crucial para evitar el riego excesivo. Utilice macetas con agujeros de drenaje adecuados para permitir que el exceso de agua se escurra. Asegúrate de utilizar tierra de alta calidad que drene bien y sea adecuada para el cultivo de cannabis. La presencia de perlita o vermiculita en la tierra puede mejorar el drenaje. Eleva ligeramente las macetas colocándolas sobre piedras o pies especiales para macetas, lo que permitirá un mejor drenaje del agua y evitará que las raíces se estanquen en agua estancada. Si utiliza platillos, asegúrese de que no contengan agua estancada tras el riego, drenando regularmente el exceso de agua.

Utilizando estas técnicas y vigilando de cerca tus plantas, podrás evitar eficazmente el riego excesivo y garantizar el crecimiento sano de tus plantas de cannabis.


Niklas Bergmann, Fachautor

Freut euch auf die Insights von unserem Biochemiker Niklas Bergmann! Mit seinem tiefen Verständnis für alles, was mit Hanf zu tun hat, liefert er euch die neuesten und coolsten Infos direkt in euer Feed. Schnörkellos und klar verpackt er das komplexe Thema Cannabinoide und macht es für euch easy zugänglich. Mit Niklas an der Spitze unseres Wissens-Teams seid ihr immer top informiert.